Locura lunar Alice Pike Barney (norteamericana, 1857-1931) |
Esta
historia iraní tiene lugar en un centro psiquiátrico. Tras tomarse la decisión
de dar el alta a algunos lunáticos del manicomio, el director les hace pasar
una prueba muy sencilla. Los lunáticos son tres.
El
director le pregunta al primero:
-
¿Cuánto son dos por dos?
-
Setenta y cuatro –contesta el hombre.
El
director, desolado, decide que ese paciente todavía no está cuerdo. Imposible
darle el alta. Le pregunta al segundo:
-
¿Cuánto son dos por dos?
-
Martes –contesta el hombre.
Ante
tal respuesta, el director toma la decisión que le parece obvia: tratar a ese
enfermo más tiempo.
Entonces
le pregunta al tercero:
-
¿Cuánto son dos por dos?
-
Cuatro.
El
director está encantado. Ordena que se dé el alta a ese hombre cuya mente se ha
curado. Sin embargo, antes de que cruce la puerta del manicomio, le pregunta:
-
¿Cómo has sabido la respuesta correcta?
-
Muy sencillo. Restando martes a setenta y cuatro.
Calcular
la salud mental
Paracelso
(1493- 1541) fue un médico suizo que encarnó una nueva corriente en la época
renacentista. También fue alquimista y astrólogo, por lo que sus aportes
siempre estuvieron entre lo natural y lo mágico o sobrenatural. Sus ideas se
movieron entre la experiencia, la especulación y las creencias en una época en
la que la ciencia se mezclaba con la espiritualidad y la religión.
Espacio Iran Darroudi (iraní, n. en 1936) |
Fue
precisamente Paracelso quien clasificó a los enfermos mentales. Una categoría,
la de los lunáticos, denomina a aquellos cuya enfermedad tiene su origen en la
luna, relacionada con sus fases. Desde la antigüedad, las fases de la luna se
habían asociado a las mareas y a la menstruación de las mujeres. Pero a partir
del siglo XVI la luna también sirvió para explicar cambios de humor y de ánimo
así como ciertas formas de locura que se presentaban a intervalos conectadas a
las fases del astro. Por ejemplo, la luna llena se relacionaba con el aumento
de la criminalidad, los ataques epilépticos y las transformaciones de los
hombres-lobo.
La
palabra manía, que forma parte de la
palabra manicomio, procede del término griego que indica furia, rabia, excitación, locura. Desde
el punto de vista psiquiátrico, una manía se define como un desorden mental
violento, caracterizado generalmente por una excitabilidad anormal, actividad
psicomotora incrementada, hablar rápido, ideas abundantes y a menudo absurdas y
contradictorias, dificultad para dormir o insomnio, confusión y muy escasa
capacidad de juicio, pudiendo conducir a situaciones peligrosas de violencia.
Somos locos Georges Rouault (francés, 1871-1958) |
El
director del manicomio del cuento, representa, en forma simplificada, investigaciones
contemporáneas muy avanzadas. Se están desarrollando modelos matemáticos y
computacionales que ayuden a simular el comportamiento de determinadas zonas de
nuestro cerebro. Con estos modelos se podría entonces lograr un conocimiento
más profundo sobre la propia fisiología y patología de nuestro órgano más
importante.
En
nuestro tiempo, hay una intensa búsqueda de espiritualidad. Algunas ramas o
corrientes ponen mucho interés en la ciencia y en las cosas que la ciencia nos
dice del mundo. Este aspecto es interesante porque aporta a esta búsqueda un
elemento de objetividad, que nos obliga a salir de nosotros mismos y a no
convertir esta espiritualidad en una autoayuda superficial o banal. El alma
humana y sus relaciones con lo visible y lo invisible son de una riqueza
insondable y necesita de todas las herramientas posibles para acercarse a esta
inmensa luz que nos alumbra, nuestro propio corazón.
(Sin título) Sohrab Sepehri (iraní, 1928-1980) |