domingo, 9 de junio de 2019

UN REGALO

Cabeza azul
Gerard Sekoto
(sudafricano, 1913-1993)


 Una niña en África, le dio a su maestra un regalo de cumpleaños.

Se trataba de un hermoso caracol.

- "¿Dónde lo encontraste?", le preguntó la maestra.

La niña le dijo que esos caracoles se encontraban solamente en cierta playa lejana.

La maestra se conmovió profundamente porque sabía que la niña había caminado muchos kilómetros para buscar el caracol.

- "No debiste haber ido tan lejos sólo para buscarme un regalo"

La sabia niña sonrió y le contestó:

- "Maestra, la larga caminata es también parte del regalo".


De la mano de la inocencia
Los regalos de la primavera
Martiros S. Sarian
(armenio, 1880-1972)

La niña africana hace un largo camino para llevar a su maestra un regalo. Esta palabra regalo encierra un sentido sorprendente. Proviene del término latino regalis que significa lo propio de un rey, y que se origina en un verbo referido a agasajar a un rey. La niña considera a su maestra una reina. Otra posibilidad para el origen de la palabra regalo es regelar, un término latino que implica romper el hielo, es decir acariciar con agasajos para lograr una vinculación afectiva.

Si aceptamos la profundidad de los cuentos populares nos va a resultar fácil comprender que la niña es símbolo de la inocencia que está en el corazón de la maestra. Para cualquier tradición los niños significan esa actitud transparente, libre de prejuicios, curiosa y atenta, que es la puerta de entrada a los saberes. Todo relato de sabiduría intenta mostrar la interioridad de los seres humanos. Aquí la niña es la figura de la actitud básica necesaria para alcanzar el conocimiento.

La inocencia nos lleva por el camino de la vida para que encontremos el conocimiento. Por eso la niña del cuento le dice que el camino es también el regalo. La vida de cada hombre es un camino hacia sí mismo, y no nos faltan aquellos que nos estimulan a seguirlo. Nuestro interior, ese mundo en el cual cada uno es rey, está poblado de señales y compañías para llegar al fin que todo camino tiene.
 
Sin título
Mahmoud Saiid
(egipcio, 1897-1964)
La niña ha viajado al mar para conseguir su regalo. A la maestra le resulta un itinerario largo considerando el significado de ese espacio. Es el símbolo de la dinámica de la vida, todo sale del mar y todo vuelve a él, es a la vez lugar de los nacimientos, de las transformaciones y de los renacimientos. Y también es un lugar de incertidumbre, de duda, de indecisión. De sus profundidades surgen monstruos, como los que aparecen desde el inconsciente. En el mar hay corrientes cálidas o frías, mortales o vivificantes.

La inocencia nos da su regalo: un caracol. Es un animal que llega lejos pero siempre va tranquilo, arrastrándose sin lastimarse y siempre con su casa a cuestas. Es muy hábil en su movimiento: puede caminar por el filo de un cuchillo y puede llegar alto aunque las paredes sean empinadas. Es hermafrodita, el mismo individuo produce espermatozoides y óvulos, pero no puede fecundarse a sí mismo, necesita de otro caracol para el intercambio y ambos individuos terminarán poniendo huevos.

La inocencia nos abre al conocimiento de la vida interior. Nos ayuda a comprender que en nuestra alma, creación divina, está todo lo que necesitamos para nuestra plenitud y la de los demás.

La reina del cielo
Frédéric Bruly Bouabré
(costamarfileño, 1923-2014)